Sobriedad y elegancia

La entrada de mi compañero me ha recordado a un andar sobrio y elegante, ese andar clásico de los cristos que tanto me gusta, y en particular a uno en cuestión, al andar del Stmo. Cristo de las Almas, de la Hdad. sevillana de los Javieres. Es un andar complicado, un andar cadenciado, un andar sobrio, un andar elegante, un andar por derecho y sin tonterias, como anda el Señor, un andar con revirás aliviadas y en las cuales cualquier recreo es innecesario. Un andar que me sabe a cuadrilla hecha, a cuadrilla con solera, a cuadrilla con muchas maneras, a CUADRILLA, en mayúsculas. Y por supuesto a Capataz por derecho sabiendo lo que se hace y lo que tiene en sus manos.

Todo son alabanzas y delicias cuando del hablar de los Javieres se trata...